ESCENARIO POLITICO

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NAVOJOA: TODOS LOS CAMINOS LLEVAN A IRVING

Por si faltara añadir algo al errático inicio del gobierno morenista que preside María del Rosario Quintero Borbón, los negocios operados por "El Hijo Incómodo" de la alcaldesa, Irving Escobosa Quintero, salpican hacia la principal oficina del Palacio Municipal, el fraude al erario por falsificación de vales de combustibles se adjudica al cachorro de la maestra Chayito, en contubernio con socios de la red de gasolineras JAG, que generó una ganancia inmediata de alrededor de un millón de pesos con cargo al presupuesto del ayuntamiento de Navojoa.

José René Rosas

Mientras el Sindico Guillermo Ruiz y los regidores montan un espectáculo mediático para enjuiciar a funcionarios de la administración pasada, por presuntos actos de corrupción y malos manejos financieros, "El Hijo Incómodo" de la alcaldesa de Navojoa, Rosario Quintero Borbón, sorprende por su capacidad para enturbiar, aún más, el inicio tambaleante del ayuntamiento en turno; Irving Escobosa Quintero, del tráfico de influencias, moches a proveedores y lo que se acumule, ha pasado en apenas poco más de un mes, a la siguiente etapa: el fraude al erario.

Y es que todos los caminos llegan a Irving, el primogénito de Chayito Quintero, quien arribó al cargo municipal con las siglas de Morena; antes durante la etapa de alcaldesa electa de su señora madre, el nombre de Irving Escobosa ya ejercía el estatus de privilegio otorgado por su mentora, palomeando el ingreso de los nuevos empleados de la comuna. Después del 15 de septiembre, su actividad se extiende a negociaciones con proveedores, acuerdos con constructoras para asignación de futuras obras públicas, entre otras muchas operaciones, sin contar con una representación oficial o nombramiento como funcionario en el incipiente gobierno de la Cuarta Transformación.

Ahora, por si faltara añadir una muesca más al errático arranque del periodo morenista, las huellas dactilares de Irving Escobosa, "El Hijo Incómodo", aparecen de forma indeleble en una maniobra presuntamente fraudulenta que apunta al uso discrecional de vales de gasolina, al parecer falsificados, para obtener ganancias ilegales por sobrefacturación en contubernio con directivos de Gasolineras JAG, hasta ahora única empresa que abastece de combustible al ayuntamiento en turno, servicio de proveeduría asignado gracias a los oficios de Irving ante la autoridad municipal.

En un informe sobre el tema elaborado para los regidores integrantes de la Comisión de Hacienda, a grandes rasgos, se establece una diferencia de alrededor de un millón de pesos, sobre el valor real de los vales de gasolina emitidos por la Secretaría de Planeación, Programación y Presupuesto, que desde el 16 de septiembre a la fecha, contabiliza un gasto aproximado a los dos millones en combustibles, diesel y gasolina con que opera el parque vehicular del ayuntamiento y que abastecen dos estaciones del grupo JAG, la que se ubica en el centro de la ciudad, enfrente de la iglesia del Sagrado Corazón y la que se localiza sobre la salida a Álamos, a un costado del supermercado Ley Aviación.

Sin embargo, las cifras no concuerdan, en Tesorería aparece un gasto de casi tres millones de pesos, cifra inflada con los vales aparentemente falsificados, con que se alcanza la cantidad citada, que no corresponde al periodo, sustentado en los registros de la Secretaría de Planeación, única dependencia que elabora y distribuye los vales de consumo  al resto de la administración; se presume que la sobrefacturación fue avalada por la alcaldesa para que se le diera trámite de pago, girando esa instrucción a los responsables del área financiera del ayuntamiento, la cual ejecutaron liberando el recurso para cubrir el adeudo; no hay lugar a dudas, la transacción fraudulenta se consumó y el excedente de un millón de pesos se distribuyó entre los beneficiarios, un negocio redondo para la posición de privilegio de Irving Escobosa.

El supuesto desfalco al erario sale a la luz en el inicio de la ronda de comparecencias de ex funcionarios de la anterior panista, que ayer comenzó con la ex tesorera Teresita Yescas Enríquez, sentada en el banquillo de los acusados, una incongruencia manifiesta pues el gobierno de Chayito Quintero, cual jurado de la Inquisición, señala con índice de fuego irregularidades y excesos en el ejercicio financiero del ayuntamiento que presidió Raúl Silva Vela, en tanto que "El Hijo Incómodo", Irving Escobosa Quintero, en apenas un mes y fracción, hace precisamente lo mismo de lo que señalan; en su soberbia, la alcaldesa Rosario Quintero, evade tocar siquiera el delicado tema que involucra a su cachorro.

La ronda de comparecencias públicas ante el síndico Jesús Guillermo Ruiz y los regidores de la comuna es una acción innecesaria como errónea, salvo por los fines publicitarios y la cortina de humo para desviar la atención sobre el escabroso caso de Irving, del que los ediles de Morena están enterados pero nadie cuestiona, callan en un silencio cómplice o tal vez por temor a represalias, como la que sufrió el regidor morenista César Zazueta, un "estatequieto" para que no ande husmeando en los "bisnes" de la alcaldesa y su familia; si en realidad se tuviera la voluntad de proceder conforme a derecho, el actual gobierno debió acudir a las instancias correspondientes, tanto legales como administrativas, para el deslinde de responsabilidades, ¿Transformación de Cuarta?.